tan cerca y tan lejos, a tan sólo un par de palabras |
Y un extraño día, un torbellino se las llevó a todas y sólo volvieron a mí cuando ya era demasiado tarde, pequeñas revoltosas.
Juguetonas, chistosas, en ocasiones, magníficas; otras, hechas de acero. Llaves de cajones secretos y de puertas que no sabes si volver a abrir.
Palabras mías, vosotras y aquéllas que se perdieron para siempre entre mis labios y ésas otras que no lograron escapar a la tecla del vacío, después de hoy y por ahora,
sólo os deseo felices sueños.